Para muchas personas y empresas, adquirir un vehículo blindado representa una inversión significativa. Sin embargo, una alternativa cada vez más popular es el arrendamiento de estos vehículos, el cual no solo brinda la posibilidad de acceder a un alto nivel de seguridad, sino que también ofrece beneficios fiscales importantes.
El arrendamiento de vehículos blindados se ha convertido en una opción atractiva para quienes buscan protección sin comprometer su liquidez.
Además de ofrecer seguridad, este esquema permite acceder a beneficios fiscales significativos, ya que los pagos de arrendamiento pueden ser deducibles de impuestos, optimizando la carga fiscal de empresas y particulares.
En un entorno donde la inseguridad impulsa la demanda de blindaje automotriz, con un crecimiento estimado del 12% para 2024 de acuerdo a Capital Mexico, el arrendamiento se presenta como una solución eficiente y fiscalmente conveniente.
El arrendamiento de vehículos es una estrategia fiscalmente inteligente, ya que permite deducir hasta el 100% los pagos realizados. Esto resulta especialmente atractivo para empresas que buscan proteger a sus ejecutivos y empleados sin comprometer su flujo de efectivo.
Además de los beneficios fiscales, el arrendamiento ofrece ventajas operativas. Algunas empresas arrendadoras suelen incluir el mantenimiento del vehículo como parte del contrato, lo que garantiza que el blindaje se mantenga en óptimas condiciones durante todo el periodo de uso. De esta manera, los usuarios pueden enfocarse en sus actividades sin preocuparse por el desgaste del vehículo.
Según cifras de la industria, el mercado de vehículos blindados en México ha crecido un 8% anual en promedio, y se espera que este crecimiento se acelere en los próximos años debido a la creciente inseguridad. Esto hace que el arrendamiento se posicione como una opción accesible y eficiente para quienes buscan seguridad sin afectar su capital.