
Muchos creen que blindar un auto reduce su valor de reventa, pero no siempre es el caso. Cuando el blindaje se realiza con proveedores certificados y se mantiene adecuadamente, puede incluso aumentar el valor percibido del vehículo.
Vehículos blindados nivel III o PRAEFECTUS CITY, con historial de mantenimiento y documentación legal, son buscados por compradores que buscan seguridad inmediata. Esto reduce el tiempo en el mercado y mejora el precio de venta.
Factores como la marca del auto, el tipo de blindaje, la antigüedad y el estado general influyen. Además, contar con un blindaje discreto (sin aspecto táctico) facilita la comercialización.
Para mantener el valor, se recomienda:
- Hacer mantenimientos semestrales del blindaje.
- Guardar facturas, certificados y garantías.
- Asegurarse de contar con Carta de Autentificación y documentación vigente cuando se trate de un blindaje integral.
En conclusión, el blindaje no es un gasto perdido: bien ejecutado, es una inversión con retorno tangible.